Byron Robayo es socio de Spingarn y uno de los abogados con más amplia experiencia en propiedad intelectual, protección de secretos empresariales y transferencia de tecnología de Ecuador.
Tratar de eliminar o limitar el actuar de estos nuevos intermediarios del comercio en internet, es impensable, cuando necesitamos estar cada vez más cerca para entender las nuevas dinámicas del mercado mundial y jugar con las mismas cartas de la creatividad y la innovación que son los jueces del mercado.
Comercio electrónico en Latinoamérica
Desde la antigüedad, el comercio se basó en la habilidad y estrategia que utilizaban los intermediarios para conectar a productores con usuarios o consumidores finales. A estos intermediarios se los llamó: mercaderes o comerciantes. Ahora, con el internet sobreviene una nueva realidad en la que los antiguos intermediarios (centros comerciales, librerías, tiendas de música) son eliminados, y se empieza a comercializar mercancías que, hasta hace poco, no se concebía su existencia ni el valor que podían llegar a tener.
La pandemia COVID-19, entre otras cosas, ha acelerado la eliminación de actores tradicionales en la realidad del comercio mundial2, y ha fortalecido el comercio electrónico a nivel nacional1 y mundial. Este último, ha reportado cambios en diversas industrias3 y mostrado su potencial para ser motor económico, incluso para las pequeñas empresas4. A su vez, esta situación dejó en evidencia la debilidad de la economía latinoamericana basada en el turismo5 y la comercialización de productos básicos, sin valor agregado considerable para sostener una demanda real6.
Esta realidad muestra que los países latinoamericanos están poco preparados para enfrentar la Cuarta Revolución Industrial y la nueva Economía de la Innovación y del Conocimiento7. En ese sentido, es necesario que los países latinoamericanos, que gozamos de tantas coincidencias, cooperemos para fortalecer nuestra economía mediante la 1) optimización de las instituciones; y, la 2) infraestructura comercial moderna, lo cual nos llevará a rediseñar la política pública encaminada hacia la innovación de productos y servicios en Latinoamérica y la mejora de nuestro comercio electrónico regional.
1. Optimizar las instituciones
Las instituciones proporcionan la estructura de incentivos de una economía; a medida que evoluciona esa estructura, da forma a la dirección del cambio económico hacia el crecimiento, el estancamiento o el declive8. En tal sentido, tres son las instituciones a las que es preciso atender con mayor cuidado en lo referente al tema que nos ocupa: 1) seguridad jurídica; 2) derechos de propiedad intelectual, y, 3) educación, investigación y transferencia de tecnología.
1.1. Seguridad jurídica
La previsibilidad que tiene una sociedad de las consecuencias de los actos de sus nacionales, es lo que se conoce como seguridad jurídica y tiene de base un fortalecido y eficiente sistema de justicia. El sistema de justicia es fundamental para el desarrollo de un ecosistema de innovación, en el cual los diferentes actores en la economía interactúan entre sí para generar nuevas oportunidades de negocio. Crear un mejor sistema de justicia ya no solamente es una iniciativa exclusiva del Estado, sino que se ha tornado en misión tanto de actores públicos9, como privados10; estos dos sectores plantean soluciones innovadoras para crear más confianza en el mercado11. Los nuevos sistemas de resolución de conflictos deben ajustarse al nuevo orden creado por la tecnología y auge de bienes que antes pasaban desapercibidos o menospreciados, como son los datos personales y el conocimiento basado en la propiedad intelectual.
Un ejemplo paradigmático de los desafíos que trae esta nueva realidad son Google, Facebook, Amazon y Netflix, que han encontrado la forma de crear nuevos mercados para Occidente donde ellos imponen las reglas de juego y son los nuevos intermediarios que permiten a otros entrar a ser parte en sus centros comerciales virtuales12. Tienen sus tiendas abiertas, sin límite de espacio y tiempo; y, además, direccionan la publicidad al consumidor potencial utilizando los datos personales de sus usuarios, conociendo sus preferencias, vulnerabilidades, necesidades y capacidad adquisitiva. Así, ofrecen ser más efectivos al vender productos y servicios en sus tiendas.
Los cuestionamientos nacen cuando estas compañías con base en las transacciones que verifican dentro de sus plataformas comerciales, empiezan a absorber a aquellos proveedores de bienes y servicios que tienen éxito en sus mercados, pues esto distorsiona la competencia, incluso en sus propias plataformas.
Mientras en Latinoamérica aún pensamos en cómo lograr que las cadenas de retail físicas den acceso a pequeños empresarios o comerciantes informales en sus perchas, en los mercados digitales desarrollados el dilema se basa en cómo limitar la visualización preferencial de los productos y servicios que ya han adquirido los dueños de estas plataformas en sus estantes virtuales. Una solución viable es limitar que puedan comercializar productos o servicios propios en sus plataformas13. Para ello, el fortalecimiento del derecho de competencia regional, aún incipiente en Latinoamérica, es muy importante, pues las multas o correctivos locales ya no son disuasivos para ninguna de estas compañías.
Este nuevo sistema de justicia también debe adaptarse, entender, actuar en conjunto y de manera inmediata con los propietarios de estos nuevos mercados digitales, para frenar a aquellos que tratan de engañar a sus usuarios dentro de sus plataformas, caso contrario, los usuarios estarán cada vez más renuentes en interactuar dentro de estos mercados en nuestros países y aquellas empresas emergentes que necesitamos, no se consolidarán, o no llegarán a nacer.
1.2. Derechos de propiedad (intelectual)
Otra cuestión relevante que hay que tomar en cuenta es que los países latinoamericanos no hemos consolidado los derechos de propiedad como base de nuestra economía. Estos derechos fueron instituidos por los países nórdicos en los siglos XVIII y XIX, y hoy son la base fundamental del sistema de representaciones en la cual se sostiene el mercado mundial de capitales.
Esta situación se ve agravada con la burocracia, corrupción y tramitología innecesaria que en nuestros países hacen que todos aquellos poseedores de bienes (sin título de propiedad) en la economía, no puedan usar estos títulos representativos, como un colateral para arriesgarse, obtener financiamiento y generar nuevos emprendimientos y negocios. Dicho de otro modo, los activos con los que contamos —por no tener el reconocimiento legal que ello conlleva— se tornan en “capital muerto”14, lo cual no permite su internación en el comercio.
A estas consideraciones hay que añadir que los derechos de propiedad hoy en día tienen un alcance mayor: el nuevo orden mundial ha catalogado a los derechos de propiedad intelectual como la base de la economía de la innovación del conocimiento15 y constituyen los activos principales que el mercado mundial está comercializando; por ejemplo: en mayo del 2012, Google compró la compañía Motorola Mobility por 12,5 billones de dólares. Luego de la adquisición el CEO y cofundador de Google, Larry Page reveló que la adquisición de Motorola fue un movimiento estratégico para fortalecer la cartera de patentes de Google y consolidarse en el mercado de tecnología Android16.
Así, entonces, Latinoamérica, lamentablemente, no es un protagonista dentro de este nuevo orden mundial, pues nuestra economía endeble esta basada en la exportación de bienes primarios que no conllevan la protección de derechos de propiedad intelectual que merezcan un reconocimiento internacional. Además, las oficinas de propiedad intelectual en Latinoamérica tampoco están preparadas para ayudar a dinamizar nuestras economías pues, por ejemplo, el registro de una patente de invención en nuestros países puede llegar a tardar en promedio entre 6 a 8 años17; es decir, que, para cuando se conceden patentes en Latinoamérica, la tecnología “protegida” ya es obsoleta, y nuestros emprendedores que necesitan de ese titulo de concesión para levantar capital o conseguir financiamiento, deberían esperar todo ese tiempo. Ante ello, lo más sensato es migrar a otros mercados más eficientes, aunando así, a una migración calificada que tanto daño nos hace, por la ineficiencia de nuestras instituciones.
De esta manera, es necesario invertir en capacitación, en el reconocimiento e importancia de la propiedad intelectual y fortalecer las oficinas locales para la protección adecuada y efectiva de los derechos de propiedad intelectual en la región.
1.3. Educación, investigación y transferencia de tecnología
Las compañías multinacionales aglutinan las mayores innovaciones del mundo, convirtiéndose en los mayores inversores en generación de patentes de invención (inventos), sea que las adquieran directamente de sus centros de investigación y desarrollo, o que las adquieran de la academia. Si estas compañías están cerca de los últimos adelantos de la ciencia y la tecnología, ¿qué necesitan para alojar y transferir su tecnología o establecer sus departamentos de investigación y desarrollo en Latinoamérica?
La respuesta más común a la pregunta tiende a aludir a la necesidad de mano de obra competitiva (barata). Sorprendentemente, las investigaciones alrededor de la decisión de las compañías en alojar y transferir su alta tecnología, no muestran que ese factor sea determinante para tal decisión; pues, si ese fuera el caso, el primer destino de la tecnología sería: país de cuarenta y un millones de habitantes, con una fuerza laboral con cifras en crecimiento continuo18 y donde el valor hora mínimo19 por trabajador ha llegado a ser de un centavo20.
Estudios han determinado que el factor fundamental para decidir alojar o transferir tecnología a un país determinado, está íntimamente relacionado con la capacidad de abstracción de tecnologías extranjeras o su consecuente capacidad de imitación21. Así, entonces, la capacidad de abstracción es la clave para generar inversión extranjera directa y transferencia de tecnología, ya sea para evitar el riesgo implícito de imitación, o, a fin de beneficiarse de la alta probabilidad de obtener ulteriores soluciones o innovaciones a lo existente en el mercado.
En tal sentido, Latinoamérica necesita mejorar su capacidad de abstracción, mejorando su sistema de educación, utilizando las herramientas que le permitan acceder a tecnología extranjera, aprehendiendo, imitando, descomponiendo, mejorando, descubriendo la tecnología detrás del arte de lo inventado, de lo resuelto por otras potencias. Solo así el sistema mismo se encargará de que los actores fundamentales, academia y sector privado generen productos lo suficientemente innovadores y con alto valor agregado para el mercado mundial y así entrar en esta nueva economía de la innovación22.
2. Mejorar la infraestructura comercial moderna
Para poder mejorar, significativamente, la infraestructura comercial moderna, los puntos críticos que deben atenderse son al menos tres: 1) acceso a nuevas tecnologías; 2) financiamiento colectivo, 3) dinero móvil, cryptomonedas y blockchain.
2.1. Acceso a nuevas tecnologías (TIC)
El acceso a internet es fundamental para Latinoamérica23. Después de esta pandemia, nos hemos dado cuenta de que el acceso a la internet es un asunto de capital importancia, pues nos permite comprar alimentos, estudiar y hasta movilizarnos de manera más eficiente y segura. Países como Estonia, que garantizó la conexión a internet como un derecho humano para sus nacionales, ha logrado, con escasos recursos y en poco tiempo, que su gente esté cerca de los últimos avances de la ciencia y la tecnología; estos hechos han permitido que tan solo en 30 años de su independencia de la ex Unión Soviética, hayan creado para el mercado mundial plataformas disruptivas como Skype, Hotmail y la más reciente Transferwise24.
Junto al acceso libre a internet está el acceso a dispositivos electrónicos, estos son capaces de conectar a las personas, no entendidos como bienes suntuarios, sino necesarios para entrar para comunicarse e informarse, derechos fundamentales que deben ser garantizados por los Estados. Por tal razón, encarecer el acceso a estos dispositivos con impuestos, no es redistribuir la riqueza, sino poner un costo al alfabetismo moderno, lo cual abre cada vez más nuestra brecha de conocimiento con relación a los países desarrollados.
2.2. Financiamiento colectivo (crowdfunding)
En nuestros países, el mercado financiero y de valores no han sido lo suficientemente efectivos para apoyar al aparato productivo. Su aporte para generar nuevos negocios y financiar emprendimientos no ha dado el resultado esperado. Y esto no es el resultado aislado del mal funcionamiento del mercado de capitales, sino que la falta de solidez de nuestras instituciones frena el dinamismo de esos mercados en la economía25. Así, la gran mayoría de emprendedores no pueden acceder a financiamiento y capital de riesgo para sacar sus proyectos al mercado.
Sin embargo, en los últimos años y gracias al internet, nace un tercer actor en el mercado de capitales, este es el crowdfunding. Este consiste en la recaudación de fondos aportados por múltiples inversionistas a través de la publicación del proyecto en plataformas de internet, disipando así el riesgo entre todos los inversionistas que apoyan para que estas buenas iniciativas lleguen a nacer26. Se trata de una poderosa herramienta de inclusión financiera27.
En la Latinoamérica tenemos gente muy creativa, pero que no tiene acceso a medios de financiamiento formales, lo cual les excluye de la economía. ¿Cómo un emprendedor latinoamericano con una excelente idea de producto puede obtener financiamiento para salir al mercado? Tal vez si este emprendedor fuera a una entidad financiera a pedir financiamiento para su idea de negocio, le dirían que necesita de un colateral real. El crowdfunding permite a los emprendedores, dueños de un prototipo, testear el mercado gracias al alcance del internet: en caso de fracasar pueden repensar su proyecto para que sea exitoso, pero si su prototipo tiene éxito, encontrarán a más inversionistas dispuestos a respaldar una idea ya probada.
Por lo señalado, es imperativo dotar de confianza al crowdfunding para apoyar aquellas buenas iniciativas de emprendimientos innovadores que queremos verlas en el mercado.
2.3. Dinero móvil, cryptomonedas y blockchain
La primera iniciativa de la desmaterialización del dinero físico fueron las tarjetas de crédito, esta innovación evitó la necesidad de llevar dinero físico y aumentaron la seguridad de las transacciones, dinamizaron y simplificaron la economía mundial. Sin embargo, las entidades financieras han tenido que invertir muchos esfuerzos y recursos en la implementación de seguridades para proteger el dinero de sus clientes. Por ello, existen costos de servicios bancarios que se trasladan a los usuarios de este tipo de transacciones, los cuales, en las economías más desarrolladas, han bajado hasta casi ser imperceptibles. En nuestros países, esta es una tarea pendiente pues lograría dinamizar las transacciones y la inclusión financiera de pequeños comerciantes que necesitan acceso a este sector formal de la economía28 . Si estos servicios financieros no son eficientes en corto plazo, serán las cryptomonedas quienes tomen el lugar de confianza que han perdido las monedas estatales centralizadas. Y esta confianza está también en el internet y cómo ahora los usuarios pueden interactuar entre sí para controlar las transacciones de todo el sistema monetario a través del blockchain, sin necesidad de intermediarios financieros. El blockchain es una estructura útilmente revolucionaria, que transparenta, de manera descentralizada e inalterable, la información, y dota de confianza a todas aquellas instituciones, tan venidas a menos en nuestros países29.
3. CONCLUSIONES
Tratar de eliminar o limitar el actuar de estos nuevos intermediarios del comercio en internet, es impensable, cuando necesitamos estar cada vez más cerca para entender las nuevas dinámicas del mercado mundial y jugar con las mismas cartas de la creatividad y la innovación que son los jueces del mercado. Al final del día, los nuevos intermediarios del internet siguen siendo intermediarios y será la misma tecnología la que se encargará de sustituirlos, o, tal vez, crear plataformas más eficientes que eliminen a los intermediarios de una buena vez, acercando directamente a productores y fabricantes, con consumidores finales.
Mejorar la capacidad de abstracción de tecnología de nuestros nacionales es la base para generar aquella inversión extranjera directa con transferencia de tecnología, que tanto anhelamos en nuestros países, puede mejorar la competitividad de nuestras empresas locales y al mismo tiempo impulsar el sistema de innovación local para crear ulteriores innovaciones. Y la clave está en aquella vinculación entre la academia y el sector productivo para generar estrategias de educación de riesgo y proporcionar programas de apoyo para aquellos lo suficientemente valientes como para tratar de llevar una idea nueva al mercado.
Para ello, es necesario diseñar una política pública regional conjunta, sostenida y enfocada en crear los incentivos adecuados para cambiar la realidad de nuestros países. La Alianza del Pacífico permitirá impulsar el crecimiento, desarrollo y competitividad de nuestra región, identificando y potencializando nuestras coincidencias para combatir la pobreza, atacar las brechas sociales y lograr el bienestar para nuestras naciones.
Bibliografía
1 Datos muestran un incremento de al menos 15 veces en compras por canales digitales o sitios web, desde el inicio del distanciamiento social. Se registra, incluso, una variación de la conducta de los compradores que antes o usaban con poca frecuencia estos canales, o no lo hacían de ningún modo. Véase: Pwc; E-Commerce en Ecuador; 2020; Pág2. Disponible en: https://www.pwc.ec/es/publicaciones/assets/e-commerce-ecuador.pdf.
2 Anam Bhatti, Hamza Akram, Hafiz Muhammad Basit, Ahmed Usman Khan, Syeda Mahwish Raza Naqvi, Muhammad Bilal; E-commerce trends during COVID-19 Pandemic; 2020; International Journal of Future Generation Communication and Networking; pág. 1450.
3 Sarah Davis y Lauren Toney; How Coronavirus (COVID-19) Is Impacting Ecommerce; ROI REVOLUTION; 2020; Disponible en: https://www.roirevolution.com/blog/2020/10/coronavirus-and-ecommerce/
4 World Trade Organization; E-commerce, trade and the COVID-19 pandemic; 2020; Disponible en: https://www.wto.org/english/tratop_e/covid19_e/ecommerce_report_e.pdf
5 Para una revisión profunda de la cuestión de la economía basada en turismo con pobres resultados, además del potencial y los obstáculos en torno a este, véase: Glauber Eduardo de Oliveira Santos; Latin American Economy and Tourism; Springer; pág. 17; Disponible en: https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-3-319-05735-4_2
6 Para un análisis sobre el modelo económico de América Latina, considerando temas como extractivismo y escasa diversificación, y las oportunidades de mercado que requieren mercancías con valor, véase: Llorente y Cuenca; La diversificación de las exportaciones en América Latina; 2016; Disponible en: https://ideas.llorenteycuenca.com/wp-content/uploads/sites/5/2016/10/161006_Dl_IR_divers_productiva_ESP.pdf
7 Id. Véase lo ya citado informe de Llorente y Cuenca.
8 North, D. (1991). Institutions. The Journal of Economic Perspectives,5(1), 97-112. Revisado: 8 de octubre de 2020; disponible en: http://www.jstor.org/stable/1942704.
9 Un caso de éxito claro en el sector púbico es el Civil Resolution Tribunal en Canadá, que centra su potencial en el diseño de sus servicios para hacerlos más centrados en el usuario y potenciar las capacidades que ofrece la tecnología. Para más información véase: Civil Resolution Tribunal; ¿Qué es el CRT y Para qué lo puedo usar?; 2020; Disponible en: https://civilresolutionbc.ca/wp-content/themes/civil-resolution-tribunal/assets/docs/translated_documents/Spanish_CRT-What-why-for-Web.pdf
10 En el sector privado, por su parte, han emergido empresas como Kleros que combina crowdsoursing, blockchain y teoría de los juegos para ofrecer un sistema de resolución de conflictos a un segmento subatendido —cuando no desatendido— de la población (conflictos con cuantías bajas). Para saber más al respecto, véase: Kleros; DISPUTE REVOLUTION: THE KLEROS HANDBOOK OF DECENTRALIZED JUSTICE; Disponible en: https://ipfs.kleros.io/ipfs/QmZeV32S2VoyUnqJsRRCh75F1fP2AeomVq2Ury2fTt9V4z/Dispute-Resolution-Kleros.pdf
11 Véase, por ejemplo, la iniciativa sobre cortes remotas a nivel mundial, lanzada por el referente mundial Richard Susskind, autor del libro “Cortes en línea y el futuro de Justicia”: https://remotecourts.org/
12Junta de Comercio y Desarrollo, Comisión de Comercio y Desarrollo, Grupo Intergubernamental de Expertos en Derecho y Política de la Competencia; Cuestiones de competencia en la economía digital; Disponible en: https://unctad.org/meetings/es/SessionalDocuments/ciclpd54_es.pdf
13 Chen Angela (2019); Cuatro formas de destruir el monopolio de Amazon, Google, Apple y Facebook; MIT Technology Review; Disponible en: https://www.technologyreview.es/s/11219/cuatro-formas-de-destruir-el-monopolio-de-amazon-google-apple-y-facebook
14 De Soto Hernando (2000); El Misterio del Capital; Empresa Editora El Comercio S.A. Pag. 32.
15 La literatura a este respecto es amplia. Una revisión profunda y actual de esta cuestión se la puede revisar en: Carlos Correa y Xavier Seuba (editores); Intellectual Property and Development: Understanding the Interfaces; 2019; Springer; Disponible en: https://www.springer.com/gp/book/9789811328558
16 Page, Larry (15 de agosto de 2011) “Android Sobrecargado: Google adquiere Motorola Mobility”; Blog oficial de Google.
17 Alejandra Vargas Morera; Latinoamérica no protege debidamente su propiedad intelectual; 2018; SciDevNet; Disponible en: https://www.scidev.net/america-latina/propiedad-intelectual/noticias/latinoamerica-no-protege-debidamente-su-propiedad-intelectual.html
18 El valor medio para Uganda durante ese período fue de 10.3 millones de personas con un mínimo de 6.31 millones en 1990 y un máximo de 16.66 millones en 2019 según datos del Banco Mundial. Información revisada en: https://es.theglobaleconomy.com/Uganda/labor_force/
19 Una revisión actualizada de esta cuestión puede verse en: Danish Trade Union Development Agency; Uganda Labour Market Profile; 2019; Pág. 17. Disponible en: https://www.ulandssekretariatet.dk/wp-content/uploads/2020/03/Uganda_lmp_2019.pdf
20 Gustavo Londeix; La lista de la injusticia: Los 10 países con los salarios mínimos más bajos del mundo; 2017; Disponible en: https://bit.ly/2GQMmhF
21 Park, Walter y Lippoldt, Douglas; Technology Transfer and The Economic Implications of the Strengthening of Intellectual Property Rights in Developing Countries; Organization for Economic Co-operation and Development; Trade Policy Working Paper No. 62; 25 de enero de 2008; p. 8.
22 Gonzalo Rivas, Sebastián Rovira, Stephany Scotto; Reformas a la institucionalidad de apoyo a la innovación en América Latina: antecedentes y lecciones de estudios de caso; 2020; CEPAL; pág. 14; Disponible en: https://www.cepal.org/es/publicaciones/36797-nuevas-instituciones-la-innovacion-practicas-experiencias-america-latina
23 Diana Suarez y Gabriel Yoguel; Latin American development and the role of technology: an introduction; 2020; Economics of Innovation and New Technology; Disponible en: https://www.tandfonline.com/doi/pdf/10.1080/10438599.2020.1715058?needAccess=true
25 Una visión amplia del estado, desafíos y proyecciones para este asunto, se ve puede encontrar: Esteban Pérez Caldentey y Daniel Titelman; La Inclusión financiera para la inserción productiva y el papel de la banca de desarrollo; 2018; CEPAL; Disponible en: https://www.cepal.org/es/publicaciones/44213-la-inclusion-financiera-la-insercion-productiva-papel-la-banca-desarrollo.
27 Ivo Jenik, Timothy Lyman, and Alessandro Nava; Crowdfunding and Financial Inclusion; 2017; CGAP; Disponible en: https://www.cgap.org/research/publication/crowdfunding-and-financial-inclusion
28 Roa García María José; García Nidia; Frías Alfonsina; Correa Laura; Panorama del dinero móvil en América Latina y el Caribe: Inclusión financiera, regulación, riesgos y costos. Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos; p. 106.
29 Para una revisión actualizada sobre temas de Blockchain y su potencial, revisar: Deloitte; Deloitte's 2020 Global Blockchain Survey; 2020; Disponible en: https://www2.deloitte.com/content/dam/insights/us/articles/6608_2020-global-blockchain-survey/DI_CIR%202020%20global%20blockchain%20survey.pdf